Quiero desaparecerte,
Sociedad que no se hizo para mí.
Ojala alguien entienda que soy yo
Quien maldice por las noches
La realidad de los días…
Quien no se inspira con la luna,
Quien a la lluvia no bendice,
Quien con el fuego se opaca,
Quien con la brisa entre sus cobijas gime.
Quien no guarda sueños bajo la almohada,
Quien nunca piensa lo que escribe,
Quien todo odia sin sentido,
Quien el deseo reprime sin argumentos…
Sin argumentos por que no los hay,
Sin argumentos por que en mi no existen,
Sin argumento por que así es la vida,
Sin argumentos, vacía y triste.
No acostumbro a copiar a la nada,
Pero es que nada me da buen motivo,
No acostumbra a romper mi silencio,
Pero el silencio ahora es mi enemigo.
Quiero todo y no quiero nada,
Quiero morir lentamente en mi cama,
Ahora no, estoy entretenido,
Busco razón para vivir mañana.
Toco las puertas que aún están cerradas,
Toco las puertas que están entreabiertas,
Toco las puertas donde no me aceptan,
Y mis nudillos ya cansados sangran.
No quiero despertar nunca más,
No quiero soñarte otra vez,
Ahora no encuentro en ti un por qué,
Ahora no, me acostumbre a perder.
Te perdí a ti en mi monotonía,
La perderé a ella entre mi abstinencia,
Ya perdí el rumbo que llevan mis días,
Perderé mi norte, no encuentro la brújula.
El sueño me atrofia, es de tontos soñar,
Pero nunca quiero sin ti despertar,
Si solo en mis sueños te puedo observar,
Tonto seré siempre, tonto por amar.